¿Qué relación hay entre las ciencias y la tecnología?
Kassandra Ortega
Última actualización: 21/01/2025
Descubre cómo y por qué las disciplinas tecnológicas, las ciencias naturales y sociales se vinculan para ayudar a mejorar y transformar una sociedad.
Cuando pensamos en ciencias sociales y tecnología, podríamos concluir que hablamos de mundos totalmente opuestos y que no se interrelacionan, sin embargo, a pesar de las diferencias entre ambos sectores, hay un punto donde se unen y la línea que los separa desaparece. Las ciencias sociales y la tecnología han estado presentes en las diferentes etapas de nuestra historia, y es posible asociar estos conceptos con áreas completamente distintas donde los componentes de una no tienen ninguna relación con la otra, pero hay un punto donde ambos extremos se unen. Antes de hablar de cómo se relacionan, tenemos que definir los dos extremos en los que se enfoca este artículo.
¿Qué es la tecnología?
Es un conjunto de conocimientos y habilidades, que tienen la finalidad de crear un objeto artificial o desarrollar una idea, y así dar solución a problemas técnicos o satisfacer necesidades propias del ser humano. Estos conocimientos y habilidades son aplicados de manera coordinada.
Generalmente, cuando se piensa en tecnología, nuestra mente visualiza dispositivos móviles de última generación, satélites artificiales, centrales eléctricas y maquinarias enormes en industrias, pero la tecnología está presente en artículos tan cotidianos y sencillos como la ropa, la vajilla de nuestra casa, las sillas de nuestro comedor o en un lápiz. La tecnología es todo aquello que surge a partir de la curiosidad del ser humano, y de su necesidad de transformar y mejorar el mundo y los elementos que lo rodea.
¿Qué son las ciencias sociales?
Es el conjunto de disciplinas focalizadas en la actividad del ser humano como parte de una sociedad. Las ciencias sociales buscan conocer las causas y las consecuencias de los comportamientos del ser humano, desde una perspectiva tanto individual como colectiva.
Las ciencias sociales abordan áreas como la sociología, la antropología, la psicología, la economía, la ciencia política, entre otras. Se enfocan en comprender cómo interactúan las personas, cómo se organizan las sociedades y cómo se desarrollan las culturas y las instituciones.
Relación entre las ciencias y la tecnología
Los avances y las diferentes innovaciones tecnológicas han estado presentes desde el comienzo de las sociedades. La tecnología ha sido un elemento clave en la transformación de las estructuras de todo tipo, desde económicas hasta las sociales y culturales (las cuales son objeto de estudio de las ciencias sociales).
La tecnología es tan antigua como el mismo ser humano, incluso surgió antes que la ciencia, ya que daba solución a una necesidad práctica e inmediata del hombre, como, por ejemplo, el fuego. El ser humano aprendió a producirlo y manejarlo mucho antes de comprenderlo; y sí, eso era tecnología avanzada en aquel entonces. La tecnología cumple un rol clave para el desarrollo de la sociedad, para la actividad social y para los procesos que le dan forma.
No se trata únicamente de instrumentos donde lo digital y el internet estén presentes, tampoco donde las pantallas sean más grandes y menos pesadas, sino que la tecnología surge como respuesta a las necesidades que las ciencias sociales consiguen identificar y analizar. La relación entre tecnología y sociedad es que, ambos conceptos requieren el uno del otro para que una comunidad pueda avanzar y mejorar.
En la era digital, las ciencias naturales y sociales y la tecnología se entrelazan de manera cada vez más, creando una sinergia que transforma tanto nuestra comprensión de la sociedad como el desarrollo tecnológico en sí mismo. Este vínculo no solo es esencial para analizar cómo la tecnología impacta en las estructuras sociales, sino también para entender cómo las ciencias pueden influir en la dirección y aplicación de nuevas tecnologías.
La relación entre ciencias sociales y tecnología es bidireccional. Mientras que la tecnología influye en la sociedad, transformando aspectos fundamentales de nuestras vidas, las ciencias sociales contribuyen a modelar y orientar estos avances para asegurar que su impacto sea positivo. Esta retroalimentación es esencial para el desarrollo de tecnologías que sean no solo innovadoras, sino también inclusivas y equitativas.